miércoles, 31 de diciembre de 2008

Mujer Lejana




Dios me ha concedido la gracia de contemplarla y con la mirada palparla, mientras trato de sentir con los ojos lo que deseo sentir con las manos y que después mi tacto se haga hielo si no encuentra más calor que el que su sonrisa emana; porque sé que debe ser mía aunque ella misma no lo sepa; mía porque el cielo lo ha dictaminado con sus estrellas el día de su santo y con la luna cercana a la tierra las noches de sopor en que sus sueños me evaporan. Mía con la razón de la tierra que alberga su aroma de hembra fértil y me hace desear cultivar sus jardines y cosechar su única flor y así tullida, pero aun hermosa, asentarla en aquel trono en el que con un sólo cirio, miles de veces encendido, aceites e inciensos, sería adorada mi deidad única y mi vida en vida y mi vida en muerte. Porque con ésta pasión con que mis palabras brotan sea recompensado en mil por ciento y sea infinitamente amado, como lo es ella, aunque lo ignore.


Porque éste mensaje que ésta botella alberga, llegue hasta su puerto y allí encuentre anclaje y permita que se construya un faro entre las grietas de su corazón para que su luz circular me guíe por siempre salvo; sorteando los acantilados de los temores y de los miedos que su belleza me causa. Sean sus ojos luz divina y sus cejas y pestañas portadoras de augurios, para que su mirada por ellas compuesta, pose sus bondades sobre mis ojos tristes y de luz llenen mi camino. Sea su discreto busto, un sucinto manantial materno y adopte con caricias crema a mi cabello atormentado y finalmente, sean sus caderas amplias, flanqueadas por sus muslos exuberantes, largos y amazónicos, un gentil mausoleo de mis ansias y me acojan por siempre muerto. Muerto, porque mi ser no vivirá un segundo más sin mi deidad; muerto, porque cual mártir deseare inmolarme para ella, sólo por haber tenido la gracia de contemplara y con la mirada palparla y hacerla mía en éste instante, aunque al decirle «buen día señorita», mi voz se quiebre por los temores y los miedos que su belleza me causa y me hunda en las sucias cerdas del trapeador: mi herramienta de trabajo, mientras agacho la cabeza violentamente para ver el piso que es hermano de mi realidad y no ver sus piernas que se alejan con el sinfónico sonido de sus tacos en el mármol, mientras ese «hola» desganado sale de su boca al caminar.
Pero aunque fuera un insulto mis oídos lo esperan para estremecer mi cuerpo cuando lo sienten y entonces mis ojos entrecerrados, hacen temblar los parpados débiles y embriagados por el ajenjo de su aroma y en un temblor aprieto el lampazo y los dientes y me siento satisfecho con aquellos segundos que tarda mi deidad cada mañana en atravesar el lobby mientras yo trapeo el mármol. Desde ese momento sueño un instante de 24 horas hasta que mis sentidos se aclaran justo cuando veo en la entrada su radiante y milagrosa silueta y vuelvo a vivir toda una vida en unos segundos mientras la siento mía en aquel vestíbulo.

martes, 18 de noviembre de 2008

Tapále con tu rebozo Llorona

«Te tocó bailar con La Llorona Carlitos…» Esas fueron las últimas palabras que escuchó mi hermano, mi carnal.

El macho de hueso colorado más macho que caminó por estos laredos, mi carnal, nació de seis kilos y medio, dos de los cuales, así de escuincle, eran nomás puro garrote y huevos. Muchas son sus hazañas y se seguirán contando mucho después de su muerte y de mi propia muerte.

Cerca de las nueve de la mañana, el ruido de la ducha me despertó, me levanté y fui hacia la cocina, pero al pasar por el baño, vi a mi carnal con la Chabela cogiendo bajo el chorro, la Chabela estaba suspendida en el aire, en vilo por la potencia del arma de mi carnal, gozaba en extremo, me vio y me mandó un beso. Me fui.





Al medio día regresé con las provisiones, Chelelo me dio tres cuetes, dos nueve milímetros y una 44 especial. «La de Harry el sucio, es pa' tu Carnal». Mascaras, bolsas grandes, ropa lycra y todo lo que habíamos previsto, «Bonnie y Clide y su mascota» decía mi carnal de nosotros tres. Era la primera vez que íbamos a robar un banco tan grande, en pleno centro de la ciudad, lleno de feria: dólares y dólares. Chabela se encueró y se puso delante de nosotros su lycra… para probar, puta madre que hembra, que tetas, que culo… sólo mi carnal se puede estar chingando una vieja así, que piel más rica, esa partecita que aparece hundidita en el lugar de la columna, ahí justo antes que se empiecen a elevar las pompas, esa partecita es mi favorita.

Cuando la conocí a la Chabela, llevaba un top que dejaba ver toda su cintura y ahí nomás le vi la espaldita y me encantó, me lancé y me la llevé a casa pa’ echarnos unos tequilitas, se estaba nomás dejando, pero nomás tantito, hasta que llegó mi carnal con su ruca y los cuatro le entramos a los tequilas, yo me dormí y me desperté al día siguiente. La Chabela estaba en la cama de mi carnal, cogiendo, como hacen siempre que se despiertan. Me fui.

A eso de las tres de la tarde partimos rumbo al City Bank de la Zona Rosa. Antes de salir de la casa, Chabela se persigno delante de una imagen de Pancho Villa, que, nosotros los bandidos como él, tenemos por santo protector. Repasamos el plan. «Tu te echas a los dos azules de la puerta, mientras yo me echo a los del fondo, y tu mija te quedas en la puerta con el patas de hule encendido, si oyes disparos, entras soltando tiros, salimos los tres y escapamos por el camino a Tamaulipas. ¿Esta claro?». Chabela y mi carnal se besan mojándose con las lenguas toda la boca, aun falta pasar por la “Colonia del Herrero”, el plan se sigue repasando, mi carnal, me sigue dando indicaciones, hay que hacer las cosas de volada, si te entra miedo, nomás aprietas los dientes, chavo, o mejor los huevos, pero eso sí, sin vacilar y nada de pesos, sólo dólares carnalito. Se acerca y me da un beso en la frente y luego me sacude el cabello con cariño, Chabela me mira por el espejo y le correspondo. Son las cuatro, no hay trafico, las calles están queditas, nos ponemos las mascaras y entramos soltando tiros. Entre todo el desmadre de cuetes, caen los azules y, la neta, sin querer, un chavo cajero, mi carnal se queda vigilando que nadie haga nada, mientras yo lleno las bolsas con dólares. Salimos de volada. «Pisale, pisale, pisale» y la Chabela lo hace.

Llegamos cerca de la salida a Tamaulipas. «Pancho Villa y Virgen de Guadalupe, Gracias» Nos bajamos para cambiar de patas de hule y ahí merito. «Te tocó bailar con la llorona Carlitos…» el cuete retumba y la sangre de mi carnal me salpica la cara.



Varias semanas habíamos planeado el robo, pero hace cinco días, una noche que mi hermano llegó bien pedo, la Chabela se metió en mi cama y me despertó mamándomela, cogimos hasta entrada la mañana y después planificamos todo, «cuando cambiemos de patas de hule me echo al cabrón del Carlos» me dijo la Chabela.

Guardé las bolsas con los dólares en el baúl mientras Chabela sacaba las petacas del otro baúl y ahí nomás, antes de encender el patas de hule, le eche un cuete a la Chabela, «los machos no merecen morir así mija…» esas fueron las últimas palabras que escuchó la Chabela. Me fui.

Rawi: Sonora, 20 de abril de 2001.

viernes, 7 de noviembre de 2008

Parecido a algo más

Cuando tenía 13 años, hubo un concurso de escritura creativa en mi colegio. Aunque este episodio tiene la mala reputación de ser recordado sólo por mí, hay quienes entre ciertas nebulosas recuerdan algo al respecto.
Resulta que había escrito mi primer poema, cuyos dos primeros versos reflejo a continuación:
“rosas, rosas…
rosas rojas, como la sangre de Jesús y de
todos los hombres”
Colina abajo desde ahí. Pero habían algunas luces que hacia parecer, a mi colección de 8 poemas, algo fuera de lugar de los primeros cursos de secundaria (intermedio se llamaba en mis épocas). Así que cuando hube terminado de leerlos delante del tribunal calificador, la profesora de Lenguaje y Literatura sentenció: Buen collage. El profesor de Filosofía de Medio dijo: Las grandes mentes piensan parecido.
Desde luego ambos estaban equivocados. No había nada de gran mente en mis poemas de bautismo literario y desde luego no era un collage ¡era un gran plagio!
Desde esa época que padezco tal estigma, siempre que hago algo, se parece a algo más, ya sean poemas, cuentos o guiones. Lo único que he hecho que no se parece a algo más es mi primera novela (tamaño desastre tiene que ser único para que el Universo se mantenga en equilibrio). En algunos casos después de hacer algo que creo mío, recuerdo donde lo vi por primera vez y en otros casos, alguien me hace saber donde lo vio por primera vez. Así que decidí, conscientemente hacer algo que se parezca a algo más.
Lo hice Voluntariamente.

Me suena…

Al pasante del Gran Poder de 1979
Al muñecudo que me acomodó en la aduana por tres meses
A la dueña del pecado placentero en Villa Fátima
Al docente de la San Andrés que me pidió unos pesos para el 51
A la vieja que vendía las hierbas de la inspiración en la trastienda de su farmacia
Al hombre del Té con Té en la timba y el boliche
A las noches enteras de singani remojado en el botín de Sáenz,
que sabía a ajenjo...
A la hembra de moral distraída del palacio quemado:
a la salud de sus interminables piernas
A la batea y sus caricias amargas
A los 19 días con la mujer que olvidó su estado civil
Al perro de su vecina que se quedó con mi zapato,
cuando el marido volvió
A la oportunidad de librarme de la tristeza de un escritorio
A la ignorancia de la que me libre por no asistir a la escuela
A los tres hombros que me faltan para llenar el poncho de Tamayo
A los remiendos que le falta a mi ropa de aparapita burgués
A esta tos de singani con derby que me muero por toser
Al perro con corbata que heredé de Viscarrowsky
A las noches de la Pérez y su hija bastarda la 21 de Calacoto.
A todas esas causas puede usted atribuirle mi mal
¿Que especialidad me recomienda?


Gracias.

martes, 4 de noviembre de 2008

De regreso, con mis escritos.

Después de haberme extraviado en pensamientos, que han incluido reseñas pseudo históricas, sobre curiosidades, simbolismo y otras cosas secundarias. He decidido volver. Volver atraído por haber visto un par de alas rotas.
Volver porque me encuentro con cierta depresión, pues algunos días faltan para acabar este año y una vez más no he visto mi libro entre mis manos.
Volver porque las sensaciones y sentimientos se contagian, pues se de personas que en este momento sienten como yo, cierta depresión.
Volver pues he leído cosas que me han devuelto la impresión impresionable del mundo que me gusta sentir, ese perpetuo imaginario en que todo lo real se desnuda, para luego vestirse con camuflaje de comedia, de tristeza, de deseo.
Estoy de regreso a mi nido, a mi círculo interior, a aquello que muchas veces me ha servido de celda y de refugio, mis escritos.
A continuación, ofrezco a ustedes, un poema que escribí… para mi musa…



Azul

Y tu: azul
en el lecho,
te tiñes de victoria
celeste
después de haberme matado un poco
después de haberme tenido por arma
y haberte matado un poco conmigo.


Gracias.

jueves, 30 de octubre de 2008

Señas y Símbolos

Bueno, después de una no exhaustiva revisión de fuentes, tuve que acudir a aquella que me causo la mayor impresión. Es un libro, sobre el que no he hallado referente en internet, se titula “Todos somos extraterrestres” (aunque la traducción puede no estar acertada), no recuerdo el autor, pero era un libro de tapa dura ploma y hojas de papel sabana, lo extraje del baúl de “secretos” de mi padre y lo leí a una edad en que no pude analizarlo o apreciarlo con totalidad. En fin, el libro trata sobre los orígenes de la humanidad, fuera de este mismo mundo, no la vida, sino la humanidad. La cultura, las creencias, etc. Habla de que la vida en la tierra llegó hace miles de años a un apogeo y tamaño similar al que tenemos ahora, inclusive población y pasó “algo” que causo una destrucción de la civilización que supuestamente era mundial. Tras muchos años, los científicos, han hallado pruebas de ese “algo” en la mitocondria de nuestras células, marcas indelebles de haber tenido que recurrir hasta la endogamia para sobrevivir. A ello se suma el estudio conjunto de la National Geographic y Discovery Channel, que concluyeron, que todas las razas actuales podrían haber nacido hace cerca de 15.000 años de un sólo y mismo núcleo familiar (¿Adán y Eva?). Bueno, pero esa es materia de otra discusión.


En el libro (de origen italiano, por cierto) se habla de cómo se ha diversificado la cultura después de ese “algo” y como los seres humanos han tratado de recordar ritos y celebraciones que les habían sido enseñadas y desde luego la misma tecnología y técnica, que habían aprendido por siglos. Pero desde luego, muchísimo de lo que sabían se perdió. Las sociedades nacientes, hurgaron en la naturaleza, en su misticismo, en sus recuerdos sociales y dieron a luz una nueva forma de rito, de cultura, de religión y de tecnología. Uno de los capítulos, estaba destinado a las sociedades secretas del hombre moderno. Ahí por supuesto, bailan desnudos ante la luna del equinoccio, desde Templarios hasta Masones.


Supuestamente, en 1919, se fundó la “Sociedad de Thule”, un club de aristócratas austriacos que mezclaron posiciones políticas racistas y xenófobas con mitos y ritos nórdicos. Hitler era miembro. Resulta, que en el emblema de la sociedad, puede apreciarse la esvástica levógira, que como bien se sabe, tiene múltiples orígenes y significados, ellos la copiaron de la mitología hinduista, del culto a la diosa Khali. Debo mencionar, que se creían herederos culturales y archivistas de la Orden de los Caballeros Teutones (Vieja orden de Caballería). En fin, crearon un brazo político, que se convirtió en el Partido Nacional Socialista y todos sabemos “el resto”. Algo que queda entre “el resto” y ahora, es que durante el mandato de Hitler, se creo la “Ahnenerbe” que supuestamente era una división de investigaciones culturales y herencia ancestral de los arios y que dependía del Ministerio de Educación. Lo que “se cree” es que la Ahnenerbe, era un grupo de arqueólogos que iban por el mundo, buscando artefactos de poderes místicos y religiosos que garantizarían la victoria al III Reich (Son los que se tiran contra Indiana Jones). De cualquier manera, Hitler creía firmemente en lo esotérico, lo oculto y lo misterioso y le iba bien en la guerra.


Al otro lado del Canal de la Mancha, un par de escoceses, acudieron a Winnie, para decirle que necesitaba un símbolo que contrarreste la esvástica. Así que ellos le dieron una versión invertida de los “Cuernos de Cabra” Se cree que el símbolo original es con los dedos índice y medio extendidos y los otros flexionados, pero la palma hacia adentro. La versión invertida es la que hizo popular Winne, como la “V” de la victoria y que se tergiversó como símbolo de la paz. Ahora bien, en sentido puramente esotérico, esa seña original (con la palma hacia adentro) significaría “te deseo victoria” y la invertida, la que uso Winne: “te deseo derrota”.

Parece haber funcionado como un símbolo poderoso en contra de la esvástica. Cabe mencionar, que estos dos Escoceses podrían haber sido miembros de los Illuminati, pero de seguro eran Masones, al margen de que hay quienes sostienen que los Masones son un núcleo interior de los Illuminati (ya saben 13 grados, 4 de Vivero, 5 de Francmasón y 4 de Maestro Misterioso).

Bueno, suena a un buen cuento misterioso, ¿verdad? Más si mi principal fuente, son los recuerdos de un libro que leí hace más de 18 años, pero si buscan en la red, encontrarán cosas que están ahí y significan algo. Quien sabe si son la gran mamada como lo fue “El Necronomicon” durante muchos años, o como lo fue la primera radiotransmisión de “La guerra de los mundos”, que hasta provocó una audiencia del Senado de los Estados Unidos.
En definitiva, tomen éste articulo, como quieran.
Gracias.

lunes, 20 de octubre de 2008

Dedo medio extendido

Bueno, todos tenemos un concepto generado, aprehendido o heredado, sobre el significado de esa seña. En muchísimas circunstancias, la connotación de su empleo, denota vulgaridad pues se presume un significado soez.
No tengo la intención de explicar su significado. Escribo esto, con fines documentales.


El origen histórico de la Seña (del dedo medio).

Durante la Guerra de los Cien Años, en la Batalla de Agincourt, combatieron 24.000 franceses de infantería ligera (que entre otras armas, incluye la arquería) y caballería; contra 6.000 arqueros ingleses, armados con diversos arcos y entre ellos, la temible “ballesta compuesta”.
Los franceses, que matemáticamente, anticipaban su victoria, planearon cortar el dedo del medio a cada uno de los prisioneros de guerra, ya que sin ese dedo sería imposible tensar el arco de la ballesta hasta la muesca y, por lo tanto, dejarían de usar un arma importantísima en futuras batallas.
Bueno, la guerra es la guerra, los ingleses ganaron la batalla y para ganar la moral de los franceses, les enseñaban el dedo medio, revelando que conocían sus planes secretos. De ahí, que puede creerse que el nacimiento de esa seña, tiene mucho que ver con la burla y el sarcasmo.
Conclusiones:
-La ballesta pronto cayó en desuso, al considerarla un arma carente de nobleza de combate y terminó siendo empleada por antisociales italianos (quien sabe los precursores de las mafias).
-La seña es mundial y sus significados, si bien rondan el mismo concepto, tienen variados significados.
Gracias.

jueves, 2 de octubre de 2008

El natalicio

¿Por qué este blogg?

La idea nació a sugerencia de un amigo que, por supuesto ya tiene mucha experiencia en esto. A decir verdad, me llevo bien con la tecnología y el nuevo manejo de la información y la universalización (palabra excesiva) del conocimiento.
Pero no intento que este blogg sea una plataforma de intercambio de conocimiento e información per se. Acudo ante ustedes: “universo”, bajo la intención que este blogg sea una plataforma de intercambio de latidos y pensamientos. Entiéndase por latidos toda aquella manifestación de los sentimientos, ya sea en forma de arte o cualquier otra forma de expresión. Los pensamientos, claro está, pueden tomar matices temáticos de toda índole, especialmente los que causan enemistades: Religión, Política y Futbol.
Quiero que todas las personas que acudan a este espacio, conozcan dos máximas, una acuñada y otra hurtada, bajo las que he sabido llevar mi vida y mi magro arte, por supuesto, con sendas, sagradas y adoloridas excepciones.
“A veces los hombres prefieren perseguir sus sueños, que ser arrastrados por sus realidades” J.C.
“He preferido hablar de cosas imposibles, porque de lo posible, se sabe demasiado” S.R.
Así que, a hablar de Literatura, Cine, Matemáticas, Ajedrez, Extranjerismo y desde luego, con mucha humildad, de mis “creaturas”, sobre las que demando muy amablemente (después de demandar ¿no?) todas las críticas y comentarios que sus mercedes vean pertinente hacer.
Gracias.